Último partido
3
0
 
Próximo partido
7/8/2025
 
Síguenos en Twitter RSS
Usuario: Contraseña:
Registrarse



8/7/2007 19:40:27

Opinión enviada por benito, desde algún lugar del mundo

salva ballesta,no y mil veces no, es un jugador frcasado viniendo a menos y polemico como el solo, solo crea malestaren el ambiente



8/7/2007 20:07:35
Usuario no registrado
Opinión enviada por VIVA HUELVA, desde algún lugar del mundo

TODO LO QUE SEA OPRESION SEVILLANA Y ANDALUZA ME REPUGNA,NO A LA TIRANIA CENTRALISTA SEVILLANA. 
 
CARRETERA HUELVA-CADIZ,YAAAAAAA.



8/7/2007 21:01:08
Usuario no registrado
Opinión enviada por molesto, desde algún lugar del mundo

benito escribió:
salva ballesta,no y mil veces no, es un jugador frcasado viniendo a menos y polemico como el solo, solo crea malestaren el ambiente
pa malestar...el que creas tu con esos comentarios c a p u l l o



4/8/2007 1:15:55
Usuario no registrado
Opinión enviada por Verdadero, desde Cádiz

La FAF ha premiado al sinvergüenza (no es un insulto, sino una definición) de Juan Limón -colaborador de los domingos de Radio Nacional en Cádiz- porque es amigo del presidente de la federacion gaditana Bernal Rosado y porque presenta un par de actos anuales de manera gratuita, por solo afan de protagonismo. 
 
Además, el 'gran profesional' de Limón ha atacado sin piedad durante años a sus propios compañeros. La última ha sido denunciar por supuesta ilegal elección de Fernando Perea (Diario ABC) como presidente de la Asociación de la Prensa Deportiva de la provincia de Cádiz -APD Cádiz-. Afortunadamente la jueza de primera instancia del número 4 de Cádiz Martínez SAiz, lo ha puesto en su sitio: ha absuleto a la Asociación de Periodistas Deportivos y le ha impuesto las costas al señorito Limón por denuncia falsa y temeraria. 
 
La APD Cádiz -esto es, sus compañeros periodistas deportivos de Cádi- lo van a nombrar persona non grata. La Federación Andaluza -el también sinvergüenza de Herrera- debería saber a quién "premia" por "agradecimientos a servicios prestados" si no quiere seguir rebozándose en su propia mierda.